El artículo presenta una visión general sobre el papel del Logopeda, Fonoaudiólogo o Terapeuta del Lenguaje en la Inclusión Educativa, como integrante de un Equipo Transdisciplinario de Apoyo
El síndrome del respirador bucal no constituye en sí mismo una enfermedad, sino que se puede deber a un conjunto de alteraciones que son las que provocan la disfunción respiratoria. En el caso que nos ocupa el síndrome del respirador bucal sería el conjunto de signos y síntomas ante la alteración patológica de la función nasorrespiratoria.
Para la Fonoaudiologia y la antropología lingüística de carácter sincrónico, el lenguaje de los jóvenes en general es sumamente importante; cuando están solos, entre sus grupos de pares, muestran un estilo vernáculo en sus formas extremas, con un autocontrol y una autocorrección mínima.
Ya que la pérdida auditiva se puede desarrollar luego de muchos años, la mayoría de las personas no están advertidas de la extensión de su pérdida hasta que la familia o amigos lo traen a su atención.
La audiología es una ciencia que se especializa en el control y la evaluación clínica de los problemas auditivos y del equilibrio en las personas de todas las edades.
Observamos que los salones que dan a la calle tienen un factor dispersante importante y los niños presentan una mayor inquietud, incidiendo directamente en el área educativa, ya que se altera la comunicación, sobre todo con los ruidos de impacto, tales como bocinas, caños de escape libres, propaganda callejera, etc.
Uno de los papeles más importantes que debe jugar el Fonoaudiólogo en la actualidad es la prevención, por lo cual en el presente artículo trataremos sobre las consecuencias que trae el ruido para nuestra salud en general, el aprendizaje y el lenguaje.
El impacto que provoca el abuso y la violencia procurados durante la infancia deja sus huellas en la vida de un niño/a. Una de esas marcas suele registrarse en el aprendizaje escolar, tanto en la apropiación de los conocimientos como en el acceso al sistema lecto- escrito.
Es importante señalar que Azcoaga usa el término “retardo” intentando significar un retraso en la adquisición de funciones pero de pronóstico favorable. Sin embargo el retardo de patogenia anártrica puede manifestarse en formas leves, moderadas y severas. Estas últimas dejarían secuelas en el aprendizaje
El lenguaje pensado como sistema de comunicación, representación y subjetivación es constitutivo del devenir de todo niño