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Hasta no hace muchos años se pensaba que el TDAH era un trastorno propio de la infancia, y que al crecer y madurar el niño dejaría de ser hiperactivo. Sin embargo hoy día se sabe que no es así, y que buena parte de los niños diagnosticados con TDAH lo siguen siendo de jóvenes y de adultos, y que les crea una serie de problemas variables en intensidad y tipología durante buena parte de su vida.
El TDAH en adolescentes y jóvenes.
Hasta no hace muchos años se pensaba que el TDAH era un trastorno propio de la infancia, y que al crecer y madurar el niño dejaría de ser hiperactivo. Sin embargo hoy día se sabe que no es así, y que buena parte de los niños diagnosticados con TDAH lo siguen siendo de jóvenes y de adultos, y que les crea una serie de problemas variables en intensidad y tipología durante buena parte de su vida.
Según diferentes estudios, entre más de un tercio y dos tercios de los niños TDAH siguen cumpliendo los criterios clínicos durante su adolescencia y juventud temprana. Los problemas más relevantes que el adolescente con TDAH presenta respecto al grupo control son:
Terminan menos frecuentemente la enseñanza secundaria hasta la selectividad, y con mas frecuencia realizan módulos de FP, etc.
Sus notas son peores y han repetido mas cursos durante la secundaria.
Acceden con menos frecuencia a la Universidad, y pueden cambiar varias veces d carrera.
Mayor dificultad para integrarse de forma estable en grupos de amistades y de pares.
Se encuentran entre los jóvenes más impopulares del instituto.
Edad más temprana de inicio de relaciones sexuales.
Mayor riesgo de embarazos de adolescentes o jóvenes.
Iniciación temprana en el consumo de alcohol y mayor frecuencia de intoxicaciones etílicas a la semana.
Peor autoestima y sentimientos de inferioridad al compararse con otros.
Frecuentes ideas de suicidio.
Comorbilidad con trastornos de ansiedad y depresión.
Sensación interna de inquietud aunque no se manifieste conductualmente.
A veces torpeza psicomotora.
Incidencia de pequeños robos, escaparse de casa, problemas tempranos con la ley.
Frecuencia de diagnóstico de Trastorno de Personalidad Disocial.
Aceptan mal la autoridad y la disciplina (conflictos frecuentes con padres, profesores, etc).
El TDAH en adultos.
Hasta hace un par de décadas ha sido muy descuidado el estudio del TDAH en adultos, y aún hoy día las investigaciones sistemáticas sobre la eficacia y seguimiento de los programas terapéuticos farmacológicos y no farmacológicos son escasos. En general se estima que de los niños con diagnóstico de TDAH, casi un tercio seguirá cumpliendo los requisitos clínicos durante la edad adulta, pero más de la mitad seguirá mostrando sintomatología atenuada (aunque ya sin satisfacer los criterios DSM-IV ó CIE-10) que a veces se ha denominado TDAH “subtipo residual”. El dato neurobiológico mas frecuente en adultos con TDAH apunta a una persistente hipoactividad frontal dopaminérgica. La estrategia medicamentosa usada en la adultez es similar a la ya bien establecida para la infancia.