!-- Google tag (gtag.js) -->
Conocer los mecanismos y procesos sobre se adquiere o aprende la lengua materna o segunda lengua, es fundamental para entender la “condición humana” que nos hace algo diferentes a otros seres vivos. Ello deber ser el centro de cualquier teoría lingüística.
Si hubiera que traducir este interesante texto al español, sin duda, tendría que titularse, así como lo indica esta columna. Se trata de “A Mind for Language: An Introductio to the Innateness Debate” escrito por el Dr. Harry van der Hulst, Profesor de Lingüística en la Universidad de Connecticut, EE.UU. recientemente publicado por Cambridge University Press, UK.
Se plantea ahora, con un enfoque actualizado, la hipótesis sobre lo innato-adquirido en la adquisición o desarrollo del lenguaje. Nuestra mente-cerebro se las arregla por sí mismo en dicho proceso o ¿está influido por las condiciones del contexto en que ocurre o le rodea? Como diría hoy un político “en el contexto de”. La pregunta que se responde extensamente en este texto es ¿Cómo el lenguaje surge en la mente humana? ¿En qué medida es una facultad que nace con nosotros o es algo que se aprende o adquiere? ¿Cómo interactúan estos factores?
Conocer los mecanismos y procesos sobre se adquiere o aprende la lengua materna o segunda lengua, es fundamental para entender la “condición humana” que nos hace algo diferentes a otros seres vivos. Ello deber ser el centro de cualquier teoría lingüística. Así nos queda claro en el estudio de este texto el rol de la naturaleza y los contextos educativos que hacen posible el aprendizaje de una lengua y los usos comunicativos respectivos.
Es un texto que compromete también la contribución hacia otras disciplinas que a menudo se han disputado, de alguna manera, el lenguaje humano como su estudio propio. El Dr. Van der Hulst sostiene que, desde un enfoque interdisciplinar, se debe comprometer fuertemente a expertos de las ciencias cognitivas, inteligencia artificial, - la lingüística por derecho propio – la antropología, la neurociencia, la filosofía, la etología (estudio de la conducta animal), la economía, la sociología, la criminología, la ciencia política, y, los estudios literarios.
El título de este libro tiene como tema central el examen de la idea de que los seres humanos tenemos habilidades mentales específicas para aprender/adquirir una lengua o lenguas así como la habilidad para usarlas en contextos específicos, también. Otras especies vivas, como los animales, no poseen estas habilidades, incluso aunque sea sometidos a experimentos de esta naturaleza, lo que no significa que no posean otras habilidades comunicativas. En sí la lectura y estudio de este libro profundiza sólo en las habilidades verbales del “ser humano”. Por ejemplo, la hipótesis del innatismo plantea que ésta facultad está inserta en el cerebro humano, o como decía Chomsky en el “correlato mente-cerebro” con especificaciones genéticas; los niños utilizan estas estructuras innatas en el aprendizaje de su lengua materna u otras propias de contextos socioculturales. Lo importante es reconocer la naturaleza de las interacciones entre el cerebro infantil que desde el nacimiento es capaz de absorber el “inducto” o input que le ofrece su propia naturaleza así como las experiencias que la educación o contextos de crianza le ofrecen. Dicho sea de paso, por ello es que se deben cuidar este tipo de interacciones desde la primera infancia cualquier sea las condiciones del nacimiento. Se trata entonces de tener presente este conocimiento en la formación de educadores desde los primeros niveles de enseñanza y aprendizaje como los es la educación pre-escolar y escolar propiamente tales.
Fíjese Ud., estimado lector o lectora, que este texto contiene además lo que su autor denomina “Genes, Brains and Evolution, The debate Continued” ( Genes, Cerebro y Evolución, el debate continúa, como una segunda parte del texto original (sequel book)). Ojalá. En los próximos años podamos contar con una traducción al español de tan importante obra como para ponernos al día en el ámbito de la “psicolingüística del desarrollo” y no vivir pensando en la “importancia del mundo de las letras”, incluso más allá de la lingüística al considerar también el mundo de la genética, las neurociencias, la comunicación animal, y la evolución de las especies. Este es un texto altamente didáctico pues está indicado para un curso de pre- o postgrado de 30 semanas además un sitio web que acompaña a ambos textos con interesantes glosarios, preguntas o problemas de investigación, discusiones y ejercicios de mucha importancia para evaluar la comprensión de contenidos. Nada mejor que en el mundo hispano echamos de menos.
Facilita la lectura de este interesante volumen, no contar con conocimientos previos de lingüística o ciencias del lenguaje pues los capítulos introductorios lo exponen de una manera bastante pedagógica, por no decir didáctica, que hace agradable el avance en el dominio de los contenidos. Así el foco de interés resalta desde las primeras páginas cuando se analiza las diferencias y similitudes entre los conceptos de “innato-adquirido”. La mente como motor en el procesamiento de la información es el concepto base del texto al mismo tiempo que nos pone al día en el debate sobre “ciencia cognitiva” desde Platón y Aristóteles en cuando que debe ser interdisciplinar , es un debate filosófico entre la filosofía y la mente que recién en la década de los 50s y 60s lo conocemos como la “revolución cognitiva” (RC) en atención a dar respuestas a un sistema de pensamiento de naturaleza política, económico y social cuando incorpora la comunicación humana. En otras palabras, la RC da cuenta de las manifestaciones de la mente vía conductas, o, formas de comportamientos. Existe entonces una “gramática mental” como órgano del cerebro que depende de sus límites físicos (maduración neurológica) y funcionales. Una de estas manifestaciones es el lenguaje como facultad, la lengua o manifestación y el habla o “discurso”. Como lo expresa la Dra.I. Berent de la Northewestern University, EE.UU. es un texto que nos “pone en las fauces de los leones”.
Claramente, su autor responde con abundantes argumentos cómo el lenguaje surge en la mente humana, y en qué medida es innato, adquirido o aprendido. Y – reitero -cómo interactúan estos factores que deberían estar siempre en el corazón de cualquier teoría lingüística. Finalmente, si no es mucho pedir, ¿podremos disponer de un texto para la comunidad de