El lenguaje es la materia prima del sistema de escritura, por lo tanto los efectos de alteraciones en el proceso de organización lingüística necesariamente se harán sentir tanto en el proceso de apropiación como en su posterior instrumentación como sistema de comunicación.
1.1.Porque evaluamos lectura y escritura para investigar lenguaje
El lenguaje puede estar alterado en el aspecto comprensivo con escaso compromiso del aspecto expresivo, o con un compromiso que en la oralidad no se evidencia suficientemente.
El sistema de escritura, mediante los recursos de investigación clínica propuestos advierte sobre estas dificultades, mostrando su distorsión.
· El lenguaje desorganizado funcionalmente pudo haber sido mejorado por simple imitación de los modelos correctos del entorno produciendo notables cambios en la dicción, lo cual no le confiere indemnidad a la función lingüística. Las distintas modalidades y sub-modalidades de lectura y de escritura, brindan datos acerca de los procesos de codificación y decodificación lingüística subyacentes. Es decir permite descubrir las huellas distorsivas que en las oralidad ya han perdido su nitidez
· Los componentes de índole emocional que se le asocian echan confusión al cuadro lingüístico de base; la escritura, en tanto sistema de comunicación y sistema de representación es totalmente permeable a estos componentes emocionales.
Por lo tanto al manifestarse en las distintas producciones de los niños aportan datos de interés en el diagnóstico
· El lenguaje es la materia prima del sistema de escritura, por lo tanto los efectos de alteraciones en el proceso de organización lingüística necesariamente se harán sentir tanto en el proceso de apropiación como en su posterior instrumentación como sistema de comunicación
Como elemento agregado, es interesante destacar que los registros escritos se transforman en un material de gran versatilidad para el examinador, pues permiten la constatación permanente de los mismos a través del tiempo, ya sea para considerar su evolución mientras el niño está en tratamiento o en los casos en los que se necesiten re-evaluaciones futuras cuando se ha concluido con el abordaje terapéutico.
1.2 Material de evaluación:
Cómo evaluamos, qué evaluamos, cuándo evaluamos.
El material permite investigar la escritura y la lectura en sus modalidades automática y espontánea y en sus distintas sub-modalidades.
Los recursos o pruebas evaluativas están agrupados en tres módulos de trabajo.
Primer Módulo:
Se trata de un material único de examen, que cubre la exploración de los tres primeros años de escolaridad primaria en forma conjunta, y corresponde a la evaluación de niños cuyas edades oscilan entre los 6 y 8 años aproximadamente. En tal sentido, se producen en la organización de este material variaciones de complejidad creciente para ser ajustadas al grado escolar que se está cursando.
Contiene además dos tarjetas "A" y "B" con todos los grafemas en imprenta mayúscula y cursiva minúscula por separado. Este material se utiliza al inicio de la exploración con niños de primero y segundo año a los efectos de constatar qué tipo de trazado gráfico maneja y qué grafemas conoce.
Esta compuesto por veinte recursos de investigación
Segundo Módulo
El material que contiene este módulo, es el que se utiliza a partir de cuarto año hasta el séptimo inclusive. Es aplicable, entonces, a educandos que tienen entre 8 y 12 años de edad. Contiene 12 recursos para cuarto año y 12 para quinto. 13 recursos para sexto año y 13 para séptimo.
Para cada grado existe un material específico de exploración, ajustado, en líneas generales, a los contenidos curriculares escolares de cada año.
Supuestamente, el niño que inicia cuarto año ya está alfabetizado no obstante, si ocasionalmente se estuviese en presencia de un niño que hubiese llegado a éste ciclo medio con un nivel de construcción de la lectura y la escritura lo suficientemente discrepante como para no poder acceder al material de cuarto año, se deberá explorar con los recursos contenidos en el primer módulo.
Tercer Módulo
Contiene un material único de examen, que cubre la investigación del octavo y noveno año, abarca una franja etaria que se extiende de los 12 a los 14 años aproximadamente.
Lo componen 12 recursos de evaluación.
Considerando que los trastornos de organización lingüística determinan secuela y que las edades que contempla este módulo pondrían en presencia de netos estados secuelares, no se consideró imprescindible seleccionar materiales separados para cada año. Por lo tanto, para la elección de los recursos de investigación, se estableció un nivel promedio de complejidad, teniendo en cuenta los contenidos curriculares de ambos cursos .
En ocasiones, y por la misma razón antes expresada, este material ha sido utilizado con jóvenes de cursos superiores .