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La lectura es una actividad enriquecedora para las personas con demencia, pues favorece la atención, el lenguaje, la comprensión y la imaginación además de que contribuye a preservar la cognición. Acercarle un libro a una persona con Alzheimer o leerle alguna historia sin duda hará pasar un rato agradable en familia.
¿Es recomendable la lectura para las personas con Alzheimer?
Para una persona con Alzheimer es difícil llevar a cabo una actividad como la lectura, principalmente porque suele perderse en la historia, como se dice coloquialmente, “pierde el hilo”. Otros factores que contribuyen a que la lectura sea una actividad complicada para ellos es la percepción de la luz, la destreza manual que suele ser deficiente, el seguimiento visual y la atención selectiva. Sin embargo, la lectura es una actividad enriquecedora para las personas con demencia, pues favorece la atención, el lenguaje, la comprensión y la imaginación además de que contribuye a preservar la cognición.
En la mayoría de las personas con Alzheimer se conserva la capacidad lectora, aun cuando presentan dificultades para hablar son capaces de leer y de reaccionar positivamente al escuchar su propia voz
Para que la lectura sea una experiencia agradable deben tomarse en cuenta algunas características tales como:
Para que no se pierdan en la historia es importante elegir cuentos cortos; cuentos que no sean infantiles puesto que estamos tratando con adultos. Si la historia tiene moraleja, se puede propiciar una especie de debate al concluir la lectura. Las historias sobre su localidad también resultan útiles, más aún si tiene fotografías. Con la lectura significativa pueden recordar acontecimientos importantes de su vida.Para estimular la cognición se recomienda la lectura de refranes y adivinanzas.
En los casos leves, los pacientes pueden leer relatos cortos, cuentos o noticias en el periódico. En los casos moderados se recomienda la lectura de poesía, fábulas o historias cortas con pocos personajes. Y en los casos con Alzheimer avanzado la sugerencia es leer palabras o dichos populares.
Acercarle un libro a una persona con Alzheimer o leerle alguna historia sin duda hará pasar un rato agradable en familia.